Una mudanza, puede causar mucho estrés para
algunos de los miembros de nuestra familia, incluyendo a nuestras mascotas. Lo
peor de esto es que tú, por más que quieras nunca podrás explicarle a tu perro
o gato que es lo que está pasando. Cada animal reacciona diferente a un nuevo
ambiente para vivir. Algunas mascotas se adaptan a una mudanza enseguida, pero
otras cuando se ven expuestas a un cambio brusco comienzan a demostrar
inseguridad y esto puede tomar días e incluso semanas.
 
Por ello te traemos algunos consejos para
considerar en el proceso de adaptación a tu nuevo hogar:
1) Viajes largos
Visita a tu veterinario y pregúntale si tiene
alguna recomendación para hacer el transporte más fácil. Si tu mascota es
ansiosa por naturaleza, tal vez valga la pena pedir un medicamento que ayude a
hacer que el cambio sea menos pesado.
 
2) Tiempo para explorar
Después de la mudanza, dale a tu mascota
algún tiempo para explorar libremente los espacios de tu/su nuevo hogar. Deja
que se pierda dentro de la casa y no limites ningún área por algunas horas deja
que recorra el lugar, hasta que encuentre pacificar su instinto y se
familiarice con los objetos y aprenda los lugares nuevos en donde pueda
encontrar su agua, alimento y su cama.
 
3) El beneficio de un buen
paseo
Lleva a tu perro por un buen paseo en donde
pueda merodear y rastrear con su olfato el vecindario. Así como tú necesitas de
tu vista para aclimatarte y familiarizarte con tu nuevo hogar, ellos también.
 
4) Supervisión especial y
nuevas placas de identificación
Evidentemente tendrás que poner especial
atención a tu mascota las primeras semanas, tomando en cuenta que él o ella
también atraviesan un cambio importante. Además de esto, es importante que
cambies la información de su placa antes de mudarte.